Urtain para mí era un personaje desconocido, tengo treinta y pocos y soy extranjera, eso me da licencia para que tal nombre o apodo, como descubrí después, no me suene de nada. Total, que el domingo pasado, fui a ver al Romea, una obra que yo creía basada en su vida, es decir, en la vida de un boxeador famoso en España en los años 70: Urtain. Siguiendo la recomendación de Daniela fui al teatro esperando ver una biografía. Pero no, no era eso, no era sólo eso, o, en cualquier caso, era también una biografía de España, de la transición. De cómo España pasa de tener una educación sentimental y una propaganda basada en valores caducos a ser un país con sus altibajos pero aceptablemente moderno. Debí sospecharlo tratándose de un montaje de Animalarío, aunque confieso que apenas conocía la compañía.
Urtain o el tigre de Cestona es un hombre básico que engañado por otros y jaleado por su vanidad animal pretende a base de fuerza bruta y amaños ser un boxeador de éxito, una celebridad de la lucha. El machito español, que no sabe ni hablar ni boxear, empieza su andadura lanzando piedras en su pueblo natal para luego ser utilizado y manipulado por una prensa corrupta y mediocre a servicio de un régimen populista que lo erige en símbolo de la valentía española. Porque, textualmente, el corazón de España se halla en los cojones.
Y de todo esto no hace tanto. Y de todo esto aún hay bastantes muestras hoy en día tanto en el bar de la esquina, como en los medios de comunicación o incluso los domingos en las comidas familiares.
Asistiend a la obra, poco a poco, a una se le encoje el corazón y al final no sabe si llorar por la suerte del pobre Urtain o por una España que hasta hace tan poco esalzaba unos valores tan brutos.
La manera de conseguir que el drama vaya in crecendo es deliciosa, toda la obra es un flash-back, que arranca con el suicidio de Urtain en el 92 poco antes de la inauguración de los juegos olímpicos y acaba prácticamente con la muerte del propio padre de Urtain en una taberna a causa de una apuesta salvaje. O lo que es lo mismo, arranca con la primera vez, después de décadas, en la que España se intenta mostrar al mundo con nuevos códigos y va retrocediendo a una España negra en la que el poder utilizaba los símbolos más rancios para promocionarse. O lo que es lo mismo arranca del suicidio del hombre fracasado por no saber decir te quiero y acaba en el tiempo en que los hombres estaban orgullosos por no saber llorar.
Animalario, nos coloca un ring casi entre las butacas y toda la obra sucede ahí extremando la metáfora de que la vida es una lucha. Los recursos y el lenguaje son además muy creativos y eficaces para que con apenas 8 actores se logre construir de manera verosímil una profusión de espacios y personajes relevantes en el relato que narra 4 décadas. Urtain es un espectáculo que renueva el lenguaje del teatro, con una verosimilitud enorme sin perder un ápice de teatralidad, mezclando géneros sin complejos para mantener el espectador en vilo de principio a fin. Y termina con el público aplaudiendo de pie.
Urtain está en cartel en Romea hasta el 22 de noviembre.
Urtain o el tigre de Cestona es un hombre básico que engañado por otros y jaleado por su vanidad animal pretende a base de fuerza bruta y amaños ser un boxeador de éxito, una celebridad de la lucha. El machito español, que no sabe ni hablar ni boxear, empieza su andadura lanzando piedras en su pueblo natal para luego ser utilizado y manipulado por una prensa corrupta y mediocre a servicio de un régimen populista que lo erige en símbolo de la valentía española. Porque, textualmente, el corazón de España se halla en los cojones.
Y de todo esto no hace tanto. Y de todo esto aún hay bastantes muestras hoy en día tanto en el bar de la esquina, como en los medios de comunicación o incluso los domingos en las comidas familiares.
Asistiend a la obra, poco a poco, a una se le encoje el corazón y al final no sabe si llorar por la suerte del pobre Urtain o por una España que hasta hace tan poco esalzaba unos valores tan brutos.
La manera de conseguir que el drama vaya in crecendo es deliciosa, toda la obra es un flash-back, que arranca con el suicidio de Urtain en el 92 poco antes de la inauguración de los juegos olímpicos y acaba prácticamente con la muerte del propio padre de Urtain en una taberna a causa de una apuesta salvaje. O lo que es lo mismo, arranca con la primera vez, después de décadas, en la que España se intenta mostrar al mundo con nuevos códigos y va retrocediendo a una España negra en la que el poder utilizaba los símbolos más rancios para promocionarse. O lo que es lo mismo arranca del suicidio del hombre fracasado por no saber decir te quiero y acaba en el tiempo en que los hombres estaban orgullosos por no saber llorar.
Animalario, nos coloca un ring casi entre las butacas y toda la obra sucede ahí extremando la metáfora de que la vida es una lucha. Los recursos y el lenguaje son además muy creativos y eficaces para que con apenas 8 actores se logre construir de manera verosímil una profusión de espacios y personajes relevantes en el relato que narra 4 décadas. Urtain es un espectáculo que renueva el lenguaje del teatro, con una verosimilitud enorme sin perder un ápice de teatralidad, mezclando géneros sin complejos para mantener el espectador en vilo de principio a fin. Y termina con el público aplaudiendo de pie.
Urtain está en cartel en Romea hasta el 22 de noviembre.
fantástica entrada y espero que no la última...la obra no me la pienso perder!!
ResponElimina¡Gracias Sandra! Qué ilusión que te haya gustado, espero no fallar en la recomendación de la obra.
ResponEliminaJoder, Elaine... nos harás espavilar... Ves preparant més ressenyes, que enganxen...
ResponEliminaGràcies Isidre! Jo encantada de escriure més, a veure si "Suministro de emociones" s'estira i em conviada al teatre... ;-)
ResponEliminaDe totes maneres ja tenim entrades pel dissabte 28 al lliure, voleu venir?
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